Fuente: youtube
Para comenzar la semana, compartimos un fragmento de la película Lugares Comunes que invita a los/as docentes a despertar en sus alumnos/as el dolor de la lucidez. Sin límites y sin piedad.
Como se podrá comprobar, del mismo se extraen una serie de reflexiones sobre el hecho educativo que forman parte de los diferentes debates pedagógicos que -aunque parecen actuales- vienen de lejos.
Lo que sí parece cierto es que la vocación del/la docente lleva aparejada la necesidad de una constante búsqueda de fórmulas para llegar a nuestro alumnado/a, ya que es indudable que -cuando uno/a es capaz de inspirar a una persona (de hacerla sentir)- el disfrute es bi-direccional y, además, se contagia a toda la tribu.