Fuente: Blog personal del profesor Boris Mir
En el enlace que se adjunta, Boris Mir hace una interesante reflexión sobre el valor real de la evaluación, destacando que no puede estar desvinculada de la participación de nuestr@s alum@s en la misma.
Así, explica que -confundir la evaluación con la calificación- es reducirla a un juicio que lo único que hace es etiquetar al alumnado bajo un número, incurriendo en que este pueda identificarse con el mismo.
El siguiente enlace te servirá de orientación para poder extraer la verdadera riqueza del acto de evaluar, que -en nuestro ámbito- tiene que tener una finalidad verdaderamente educativa.